Frederick Austerlitz, mejor conocido como Fred Astaire, fue un actor, cantante, coreógrafo y bailarín de teatro y cine estadounidense. Nació el 10 de mayo de 1899 en Omaha, Nebraska, y falleció el 22 de junio de 1987 en Los Angeles, California.
Su carrera teatral y su posterior carrera en el cine abarcó un total de setenta y seis años, durante los que rodó 31 películas musicales. Está particularmente asociado con Ginger Rogers, con quien hizo diez películas que revolucionaron el género.
Balanchine y Nureyev le consideraron el mejor bailarín del siglo XX, y está generalmente reconocido como uno de los bailarines más influyentes en la historia de los musicales de cine y televisión. Fue nombrado la quinta «Mejor estrella masculina de todos los tiempos» por el American Film Institute.
Contenido
* 1 Primeros años y carrera
* 2 Fred y Ginger
* 3 Destreza en canto y baile
* 4 Otras parejas
* 5 Filmografía
* 6 Notas
* 7 Enlaces externos
Su padre era un inmigrante austríaco y católico; su madre nació en los Estados Unidos de padres alemanes luteranos; Astaire se convirtió en episcopaliano en 1912.
Astaire era un nombre tomado por él y su hermana Adele Astaire para su actuación vodevil en 1905. Una leyenda familiar lo atribuye a un tío apellidado «L’Astaire». Su carrera vodevil continuó, con una mezcla de éxitos y algunas interrupciones debido a las acciones de la Gerry Society, hasta que se presentaron en Broadway con Over The Top en 1917. Muchas fuentes afirman que los hermanos Astaire aparecieron en una película de 1915 titulada Fanchon, the Cricket, protagonizada por Mary Pickford, pero esto no está corroborado. Fred Astaire conoció a George Gershwin, que estaba trabajando como «song plugger» en Jerome H. Remick’s, y en 1916 empezó una amistad más íntima que tendría profundas consecuencias para las posteriores carreras de ambos artistas.
Durante los años 1920, Fred y Adele aparecieron en Broadway y en teatros de Londres en espectáculos como Lady Be Good, Funny Face y The Band Wagon, ganándose la aclamación del público de ambas partes del Atlántico. Hicieron varias grabaciones en equipo. Se separaron en 1932, cuando Adele se casó con su primer marido, Charles Cavendish, un hijo del Duque de Devonshire. Fred continuó consiguiendo éxitos por si solo en Broadway y en Londres con Gay Divorce, mientras consideraba ofertas de Hollywood.
Según el folclore de Hollywood, en un informe de una prueba cinematográfica de Astaire con RKO Pictures, ahora perdido junto con la prueba, se supone que leía: «No sabe cantar. No sabe actuar. Con entradas. Sabe bailar un poco.» El productor de películas de Astaire-Rogers Pandro S. Berman afirmó que él nunca lo había dicho en los años 1930 y que sólo salió a la luz años más tarde. Astaire, en una entrevista de 1980 en el programa 20/20 de ABC con Barbara Walters, insistió que en el informe ponía realmente: «No sabe actuar. Ligeramente calvo. También baila». No obstante, la prueba fue claramente decepcionante y en una libreta del estudio de 1933 David O. Selznick, que había contratado a Astaire en RKO y se había encargado de la prueba, la describió como «espantoso». En cualquier caso, el informe de la prueba no afectó a los planes de la RKO por Astaire, primero prestándolo durante unos pocos días a MGM en 1933 para su debut en Hollywood, donde apareció como él mismo bailando con Joan Crawford en la exitosa película musical Dancing Lady.
En su retorno a RKO Pictures encabezó el reparto al lado de Ginger Rogers y Dolores del Río en la película de 1933 Flying Down to Rio. En una crítica, la revista Variety atribuyó su enorme éxito a la presencia de Astaire: «El principal punto de Flying Down to Rio es la promesa de la pantalla Fred Astaire … Él es una apuesta segura después de esta película, porque la pantalla le quiere claramente, el micro es amable con su voz y como bailarín pertenece a una clase para sí solo. La última observación no será noticia para la profesión, que ha admitido desde hace tiempo que Astaire comienza a bailar donde los otros no llegan.» Aunque Astaire fue inicialmente muy reacio a formar parte de otros equipos de baile, fue convencido por las súplicas obvias del público de la pareja Astaire-Rogers y continuó para hacer un total de diez películas musicales con Ginger Rogers.
Esa pareja y la coreografía de Astaire y Hermes Pan, ayudaron a hacer del baile un elemento importante de las películas de musicales de Hollywood. La serie de Astaire-Rogers está entre las mejores películas de los años 1930. Incluyen The Gay Divorcee (1934), Roberta (1935), Top Hat (1935), Follow the Fleet (1936), Swing Time (1936), Shall We Dance (1937), y Carefree (1938). Su trabajo en común les elevó al estrellato; como Katharine Hepburn dijo, «Él le da clase y ella le da sexo.».
A Astaire se le reconocen dos innovaciones importantes en las primeras películas musicales. Primero, su insistencia de que la cámara (casi estacionaria) filmara una rutina de baile en una única toma, si es posible, mientras mantiene a los bailarines en todo el encuadre durante todo el tiempo – una política que Astaire mantuvo desde The Gay Divorcee (1934) hacia adelante, hasta que fue invalidado por Francis Ford Coppola – que también despidió a Hermes Pan – cuando dirigía Finian’s Rainbow (1968). Él bromeó estupendamente: «Bailará la cámara, o bailaré yo.» Segundo, fue firme en que todas las canciones y rutinas de baile estuvieran integradas suavemente en el argumento de la película. Típicamente, una película de Astaire incluiría una interpretación individual por Astaire, una rutina de baile de comedia en pareja y una rutina de baile romántico en pareja.
Los críticos de baile Arlene Croce y John Mueller consideran que Rogers ha sido la mejor pareja de baile de Astaire, mientras reconocen que algunas de sus últimas parejas mostraron una destreza de técnica de baile superior, un punto de vista compartido por Hermes Pan and Stanley Donen. La crítico de cine Pauline Kael adopta una posición más neutral, mientras el crítico de cine Richard Schickel de la Revista Time escribe «La nostalgia alrededor de Rogers-Astaire tiende a descolorar a otras parejas.».
Mueller resume las capacidades de Rogers como sigue: «Rogers sobresalía entre las parejas de Astaire no porque fuera superior a otras como bailarina sino porque, como una actriz intuitiva y hábil, ella era suficientemente cautelosa para darse cuenta que la interpretación no acababa cuando el baile comenzaba … la razón por la que muchas mujeres han fantaseado bailar con Fred Astaire es que Ginger Rogers transmitía la impresión de que bailar con él es la experiencia más emocionante imaginable.» Según Astaire, «Ginger nunca había bailado con una pareja anteriormente. Ella lo fingió muchísimo. No sabía hacer claqué y no sabía hacer esto y aquello … pero Ginger tenía estilo y talento y lo mejoró mientras le acompañaba. Lo entendió tanto que después de un tiempo cualquiera que bailaba conmigo me parecía mal.»
Sin embargo, Astaire seguía poco dispuesto a tener su carrera atada exclusivamente a cualquier pareja, ya habiendo sido vinculado con su hermana Adele en el teatro. Incluso negoció con RKO para emprender el camino en solitario con «A Damsel in Distress» en 1937, que resultó una película sin éxito. Volvió para hacer dos películas más con Rogers, Carefree y The Story of Vernon and Irene Castle y, cuando los dos perdieron dinero, Astaire dejó RKO, mientras Rogers permaneció y se convirtió en la propiedad más fuerte del estudio a principios de los años 1940. Se reunieron en 1949 para su décima y última aparición en The Barkleys of Broadway.
Astaire fue un bailarín virtuoso, capaz de transmitir riesgos despreocupadamente o emociones profundas cuando se exigía. Su control técnico y sentido del ritmo fueron asombrosos; según una anécdota, era capaz, cuando era llamado de nuevo al estudio de rehacer un número de baile que había filmado hacía varias semanas para un número de efectos especiales, de reproducir la rutina con exactitud hasta el último gesto. La ejecución de una rutina de baile de Astaire era de primera por su elegancia, gracia, originalidad y precisión. Él tiró de una variedad de influencias, incluyendo claqué y otros ritmos afroamericanos, baile clásico y el estilo elevado de Vernon y Irene Castle, para crear un estilo de baile único y reconocible que influyó ampliamente el estilo «American Smooth» del baile de salón, y fijó los estándares contra los que los posteriores musicales en cine serían juzgados. Coreografió todas sus propias rutinas, normalmente con la ayuda de otros coreógrafos, principalmente Hermes Pan.
Su perfeccionismo fue legendario así como lo fue su modestia y consideración hacia sus artistas prójimos; sin embargo, su implacable insistencia en ensayos y nuevas tomas fue un carga para algunos. Aunque se veía a sí mismo principalmente como un artista, su consumado arte le dio la adulación de algunas leyendas del baile del siglo XX como Michael Jackson , George Balanchine, los hermanos Nicholas, Mikhail Baryshnikov, Margot Fonteyn, Bob Fosse, Gregory Hines, Gene Kelly, Rudolf Nuréyev y Bill Robinson.
Extremadamente modesto sobre sus capacidades de canto – frecuentemente afirmaba que no podía cantar – Astaire presentó algunas de las canciones más célebres del Great American Songbook, en particular, «Night and Day» de Cole Porter en Gay Divorce (1932); «Isn’t it a Lovely Day» de Irving Berlin, «Cheek to Cheek» y «Top Hat, White Tie and Tails» en Top Hat (1935), «Let’s Face the Music and Dance» en Follow the Fleet (1936) y «Change Partners» en Carefree (1938). Presentó «The Way You Look Tonight» de Jerome Kern en Swing Time (1936); «They Can’t Take That Away From Me» de the Gershwins’ en Shall We Dance (1937), «A Foggy Day» y «Nice Work if You Can Get it» en A Damsel in Distress (1937) y presentó «One for My Baby» de Johnny Mercer en The Sky’s the Limit (1943) y «Something’s Gotta Give» en Daddy Long Legs (1955) junto con Harry Warren y «This Heart of Mine» de Arthur Freed en Ziegfeld Follies (1946).
Astaire también copresentó un número de canciones clásicas a través de duetos musicales con sus parejas. Por ejemplo, con su hermana Adele, él copresentó «I’ll Build a Stairway to Paradise» de the Gershwins’ en Stop Flirting (1923), «Fascinating Rhythm» en Lady, Be Good (1924), «Funny Face» y «‘S Wonderful» en Funny Face (1927); y, en duetos con Ginger Rogers, él presentó «I’m Putting All My Eggs In One Basket» de Irving Berlin en Follow the Fleet (1936), «Pick Yourself Up» de Jerome Kern y «A Fine Romance» en Swing Time (1936), junto con «Let’s Call The Whole Thing Off» de The Gershwins’ en Shall We Dance (1937). Con Judy Garland cantó «A Couple of Swells» de Irving Berlin en Easter Parade (1948); y, con Jack Buchanan, Oscar Levant y Nanette Fabray cantó «That’s Entertainment» de Betty Comden y Adolph Green en The Band Wagon (1953).
Aunque poseía una voz suave, era admirado por su lirismo, dicción y construcción – la gracia y la elegancia tan apreciada en su baile parecía ser reflejada en su cante, una capacidad de síntesis que llevó a Burton Lane a describirle como «El mejor intérprete musical del mundo.» Irving Berlin consideró Astaire igual que cualquier intérprete masculino de sus canciones – «tan bueno como Jolson, Crosby o Sinatra, no necesariamente por su voz, sino por su idea de proyectar una canción». Jerome Kern le consideró el intérprete masculino supremo de sus canciones y Cole Porter y Johnny Mercer también admiraron su tratamiento único de su trabajo. Y mientras George Gershwin era algo crítico con las capacidades de cante de Astaire, escribió muchas de sus canciones más memorables para él.
En 1939, Astaire dejó RKO para hacerse autónomo y buscar nuevas oportunidades cinematográficas. Se unió con otras estrellas, notablemente con Bing Crosby en Holiday Inn (1942) y más tarde Blue Skies (1946). Fue casi superado en Broadway Melody of 1940 (1940) por una de sus primeras parejas de baile post-Rogers, Eleanor Powell. Otras parejas durante este período incluyen Paulette Goddard en Second Chorus (1940), Rita Hayworth en You’ll Never Get Rich (1941) y You Were Never Lovelier (1942), Joan Leslie en The Sky’s the Limit (1943), y Lucille Bremer en Yolanda and the Thief (1945) y Ziegfeld Follies (1946). Ziegfeld Follies también contiene una pareja memorable de Astaire con Gene Kelly.
Después de anunciar su retirada con Blue Skies en 1946, Astaire pronto volvió a la gran pantalla para reemplazar al herido Gene Kelly en Easter Parade (1948) junto con Judy Garland y Ann Miller, y para una reunión final con Rogers, The Barkleys of Broadway (1949). Él entonces siguió haciendo más musicales durante los años 1950: Let’s Dance (1950) con Betty Hutton, Royal Wedding (1951) con Jane Powell, Three Little Words (1950) y The Belle of New York (1952) con Vera Ellen, The Band Wagon (1953) y Silk Stockings (1957) con Cyd Charisse, Daddy Long Legs (1955) con Leslie Caron, y Funny Face (1957) con Audrey Hepburn. Su legado en este punto eran treinta películas de musicales en un período de veinticinco años. Más tarde, Astaire anunció que se retiraba de bailar en el cine para concentrarse en el teatro dramático, obteniendo críticas muy favorables para el drama sobre la guerra nuclear On the Beach (1959).
Murió el 22 de junio de 1987. Fue enterrado en el Cementerio Oakwood Memorial Park in Chatsworth (California).