Francis Albert Sinatra (Hoboken, 12 de diciembre de 1915 – Los Ángeles, 14 de mayo de 1998), más conocido como Frank Sinatra, fue un cantante y actor estadounidense. Apodado «La Voz», fue una de las figuras más importantes de la música popular del siglo XX y dejó, a través de sus discos y actuaciones en directo, un legado canónico en lo que respecta a la interpretación vocal masculina de esa música. Su popularidad llegó a ser inmensa y prácticamente constante a lo largo de toda su vida, aunque fueron especialmente exitosos los años cuarenta y cincuenta, siendo esta última década, con su producción discográfica para la compañía Capitol, la considerada como su etapa de mayor calidad artística como cantante.
Su repertorio se basó en la obra de los más importantes compositores populares estadounidenses, como Jimmy Van Heusen, Cole Porter, Sammy Cahn o George Gershwin, y su estilo sintetizó, ya en sus orígenes, quince años de influencias mutuas entre la música de inspiración jazzística y la música pop que empezaba a difundirse a través de la radio. Sinatra construyó su estilo sobre la base de una comprensión natural de la música popular, tal como la habían entendido Bing Crosby, Fred Astaire, Benny Goodman y Louis Armstrong, explotando la idea de que esta, en todas sus vertientes, debería ser una extensión de la conversación.
Técnicamente, se caracterizó por su cuidada precisión en el fraseo y su dominio del control de la respiración; el rango de su voz estaba próximo al de barítono. En cuanto a su categoría artística, esta radica en su capacidad interpretativa para transmitir las emociones y sentimientos implícitos en las letras de las canciones.
En Sinatra, cualquier tipo de consideración vocal e, incluso, musical, resulta secundaria respecto de la que es su misión principal: contar una historia de la forma más expresiva posible.
A Sinatra se le reconoce históricamente el haber sido el primer cantante que hace un uso consciente de los medios de amplificación del sonido con el objeto de situar su voz por encima del sonido de la orquesta (dominadora de la música popular estadounidense de principios del siglo XX) y para aproximarla a la intimidad del oído del oyente.
Como actor, Sinatra fue un artista de tipo intuitivo, reacio a someterse a los ensayos y repeticiones habituales en una grabación, por lo que sus interpretaciones fueron emocionalmente intensas al tiempo que irregulares. La importancia en su vida de su trabajo actoral fue capital; por ejemplo fue precisamente a través de su papel en De aquí a la eternidad como logró salir de un bache personal y artístico en el tránsito de los años cuarenta a los cincuenta para encumbrarse en lo más alto de la popularidad, además de ganar por su interpretación el Óscar al mejor actor secundario.
A lo largo de su carrera profesional, Sinatra grabó más de 1.300 canciones y participó en más de cincuenta películas. Recibió multitud de premios y homenajes, entre los que se cuentan diez Grammys, el Premio de la Academia de Artes y Ciencias de la Grabación y la Medalla de la Libertad del gobierno estadounidense.
Vida privada
La inmensa popularidad de Sinatra, ya desde los mismos inicios de su carrera artística durante los años 40, condicionaron por completo su vida, tanto en el ámbito privado como en el ámbito público. En primer lugar, trastornó su vida familiar.
Sinatra se había casado en 1939 con Nancy Barbato. Los continuos viajes del cantante posibilitaron su infidelidad casi desde el comienzo del matrimonio, aun cuando llegaron a tener tres hijos (Nancy, Frank y Tina). Aunque Sinatra intentó mantener una imagen pública a través de los medio de hombre familiar, la situación se hizo tan insostenible para ella que en San Valentín de 1950 Nancy anuncia su decisión de separarse definitivamente de él, debido a que sale a la luz la relación que mantenían su marido y Ava Gardner. La anulación del matrimonio llegaría el 31 de octubre de 1951, y poco después La Voz y El animal más bello se casaron. Su luna de miel la hicieron en Cuba, hospedándose en el Hotel Nacional de La Habana. A pesar de esta ruptura y de las razones para la misma, a lo largo de los años ella jamás le hizo el más mínimo reproche público a Sinatra. A su vez, Sinatra jamás le dio la espalda a ella ni a sus hijos.
Frank siempre la llamó su «sweetheart» (mi vida) y confió en ella totalmente. «Ella es la única mujer que me comprende», decía a sus amigos. Nunca dejó de quererla, pero nunca volvió con ella.
Su relación con Ava Gardner, la que mejor materializa sus relaciones sentimentales públicas, fue extraordinariamente problemática. Profundamente enamorados uno del otro, con una carga erótica muy palpable, el choque de caracteres destruyó la relación. Sinatra sufrió en sus propias carnes lo mismo que había sufrido su mujer Nancy por sus infidelidades: Ava Gardner no solo era una actriz inmensamente popular sino que su belleza y deseo sexual eran harto conocidos: plagada de celos, peleas violentas, borracheras de uno y del otro, e incluso intentos de suicidio por parte de Sinatra, la relación se fue al traste con dos abortos de ella por el medio. El 27 de octubre de 1953 decidieron separarse, provocando una tercera intentona de suicidio que fue impedida por un amigo del cantante.
Al divorciarse de Ava encontró un gran apoyo en Marilyn Monroe, que también se había separado de su marido Joe DiMaggio. Se hicieron muy amigos e incluso Monroe se fue a casa de Sinatra a vivir un tiempo cuando ya su suicidio andaba cerca.
El magnetismo de Sinatra se materializó públicamente en la formación espontánea de un grupo de amigos al que Lauren Bacall, denominó “Rat Pack” o también “Clan Sinatra”. Esta banda estaba compuesto por multitud de actores y actrices, Jerry Lewis, Dean Martin, Sammy Davis Jr., Peter Lawford, Joey Bishop, Shirley MacLaine, David Niven, Humphrey Bogart, quien diría: «Nos admirábamos mutuamente y no necesitábamos nada más».
Eran famosas las fiestas y orgías de este grupo, siempre acompañadas de mucho alcohol, drogas y prostitutas. Frank era el “Pack master”, por lo que era admirado y respetado por el resto de “Packers”.
Se casó por tercera vez con la actriz Mia Farrow en 1966, pero el enlace solo duraría 2 años, así que se casó una cuarta y última vez con Barbara Marx (exmujer de Zeppo Marx) en 1976.
Relaciones con la mafia
Uno de los aspectos de la vida de Sinatra más polémicos y criticados y que más problemas le dio en vida fue el de sus relaciones con la mafia, llegando al punto de verse obligado a declarar al respecto en una comisión de la Cámara de Representantes el 18 de julio de 1972. Aunque estas relaciones fueron ciertas (fue amigo, por ejemplo, del mafioso Sam Giancana) nunca se pudo presentar ninguna prueba de que hubiese estado involucrado en ninguna actividad ilegal, sino que más bien fueron una consecuencia de su proyección como cantante, lo que le habría llevado a contactar con quienes dominaban las grandes salas de conciertos de Estados Unidos y a valerse de su apoyo, llegando por ejemplo a trabajar para Giancana en numerosos clubes nocturnos.
No obstante, su relación con la Cosa Nostra fue muy íntima desde el principio. Uno de sus tíos, Babe Gavarante, era miembro de una banda que tenía su área de actuación en el Condado de Bergen, al norte de Nueva Jersey, y que estaba controlada por el entonces capo de la “Oficina” (nombre que recibe la mafia en Nueva Jersey) Guarino «Willie» Moretti. Asimismo, la primera mujer de Sinatra, Nancy Barbato, era prima de una de los “soldados” de Moretti y Sinatra fue invitado a cantar en la boda de la hija de éste. En este hecho se basarían Mario Puzo y director de cine Francis Ford Coppola para una de las escenas del libro y la película El padrino, en la cual, el cantante «Johnny Fontane» acude a cantar al matrimonio de Connie Corleone, hija de Vito Corleone, padrino de Fontane a quien luego le pide ayuda para ser seleccionado en una película que alzaría su fama.
Moretti sufría de sífilis y su salud física y mental se fue deteriorando. Ante el miedo de que pudiera hablar más de la cuenta, la familia decidió liquidarlo, hecho que fue llevado a cabo por cuatro sicarios el 4 de octubre de 1951, precisamente el día en que había quedado para comer con Jerry Lewis y Dean Martin, quienes, en compañía del propio Sinatra, actuaban de vez en cuando en el Ben Marden´s Riviera Club de Nueva York, local del que era propietario una de los “soldados” de Moretti.
También se tiene constancia de que Sinatra mantuvo una gran amistad con Lucky Luciano, el considerado padre del crimen organizado, a quien visitó en La Habana en un par de ocasiones y posteriormente en su exilio en Sicilia. Asimismo hay pruebas de que fue invitado de honor, y cantó, en la fiesta de Navidad de 1946 que Luciano organizó en Nápoles.
En los archivos del FBI se conserva un expediente sobre Sinatra de 2403 páginas.